viernes, mayo 13, 2005

invernada en estacion Concordia

Primer invierno en la estación antártica Concordia
publicado en www.univision.com

04 de Mayo de 2005, 12:59pm ET
PARIS, Mayo 4 (AFP) -
Doce hombres y una mujer entraron este miércoles en una larga noche glacial en la estación antártica franco-italiana de Concordia, que verá su primer experimento de invernación científico en completa autarquía, en condiciones extremas y sin posibilidad de ser salvados del exterior.

"Todo va bien", dijo durante una videoconferencia con París, Michel Munoz, jefe de la misión. En el exterior la temperatura era de menos 60 grados centígrados.

La víspera habían visto su último amanecer antes de que pasen varios meses.

Prisioneros del frío y de la noche a 3.600 metros de altura, los 13 miembros del equipo viven desde hace dos meses y hasta noviembre en dos edificios cilíndricos sobre pilones de una superficie de 1.500 m2: de un lado laboratorios y dormitorios y del otro talleres y restaurante.

Fruto de una colaboración entre el Instituto polar francés Paul-Emile Victor (IPEV, basado en Brest, noroeste) y su homólogo italiano, Programma Nazionale di Ricerche in Antarctide (PNRA, Roma), la construcción de Concordia costó 32 millones de euros (unos 40 millones de dólares).

Durante esta estadía el personal de "Concordia" probará las instalaciones destinadas a la invernación y realizará investigaciones de glaciología, astronomía, climatología y medicina.

Entre las tareas a realizar se cuenta la constitución de un fondo sobre las modificaciones climáticas en los últimos 900.000 años. Por su parte, en medicina se estudiará la adaptación del hombre a las condiciones hostiles (frío, altura, aislamiento).

El estudio de la evolución de la capa de ozono, el estudio de la capa atmosférica polar y el inicio de las tempestades serán otros campos que analizarán los científicos aislados en Concordia.

gcv/pc/mic/jr/Eguz

1 comentario:

  1. El lugar fue escogido porque allí ya existe una estación de verano.

    Durante esta prolongada estadía, el personal de Concordia probará las instalaciones concebidas para la estación invernal y realizará investigaciones de glaciología, astronomía, climatología y medicina.

    Una de las principales misiones consistirá en constituir una base de datos sobre las modificaciones climáticas en los últimos 900.000 años.

    A través de perforaciones del casquete glaciar, se podrán extraer diferentes capas de hielo que aportarán datos esenciales para estudiar las grandes alteraciones de temperatura a través de los siglos.

    El equipo médico, en cooperación con la Agencia Espacial Europea (AEE), estudiará la adaptación del hombre a las condiciones hostiles (frío, altura, aislamiento), no sólo desde el punto de vista clínico, sino también en el aspecto fisiológico y psicológico.

    Los científicos aislados en Concordia también analizarán la evolución de la capa de ozono, la capa atmosférica polar y apasionante fenómeno que provoca el inicio de los vientos.

    Esos ambiciosos objetivos serían imposibles de alcanzar sin un programa perfectamente organizado.

    "La vida tendrá un ritmo regular", reconoce Michel Galland, electromecánico de la estación. De lunes a sábado, la jornada de trabajo se extenderá desde las 8.00 a las 17.30 horas. El domingo será el único día de descanso.

    El cocinero francés Jean-Louis Duraffourg es el encargado de preparar las tres comidas: un buffet como desayuno, mientras que el almuerzo y la cena son servidos en mesas para cuatro o cinco personas. El domingo las 13 personas se sentarán en torno de una mesa familiar "con mantel blanco y flores artificiales", prometió.

    En este medio ambiente extremadamente frágil, se adoptaron las medidas necesarias para reciclar los residuos: "En dos años se completará el tratamiento de 90 por ciento de las aguas residuales producidas en la estación", asegura la científica Claire Le Calvez.

    Por lo demás, "no arrojaremos nada a la naturaleza y no quemaremos nada. Todo será separado por categoría de residuos y enviado en contenedores a la base antártica Dumont d'Urville, y luego a Francia".

    El equipo contempló inclusive las hipótesis de crisis que pueden presentarse en esas condiciones de aislamiento y sin posibilidades de recibir ayuda exterior inmediata.

    "Están previstas las principales alternativas para que podamos resolverlas nosotros mismos", aseguró Michel Munoz.

    En caso de emergencia médica, podrán contar con el auxilio del italiano Roberto Dicasillati.

    Si la estación resulta destruida por un incendio, los 13 científicos podrán replegarse a la base de verano: en un contenedor -ubicado a prudente distancia de los locales habitables- "hay víveres, ropa y equipamiento de seguridad" para sobrevivir hasta la llegada de los equipos de auxilio.

    Claire Le Calvez compara la vida dentro de la base a las condiciones que conocen los astronautas a bordo de una estación espacial.

    Si esta primera experiencia concluye exitosamente, para el futuro se proyecta enviar todos los años misiones permanentes de 16 personas que pasarán los nueve del invierno antártico en esas instalaciones. Durante el corto verano, esa base y el anexo estival permitirán acoger grupos de hasta 40 personas.

    gcv/pc/cam

    http://www.univision.com/contentroot/wirefeeds/world/2920291.html

    ResponderBorrar