Publicado en WWW.SCAVARELLI.COM
URUGUAY - OPINIONES DE VANGUARDIA.-
Por el Coronel Orosmán PEREYRA PRIETO.-
12 Nov 2007
Nueva Incapacidad del Gobierno Nacional, en Política Exterior, pone en peligro la permanencia de nuestro país, dentro del Sistema Antártico.-
El Uruguay se relaciona con la Antártida, desde la época donde América del Sur, formaba parte de las colonias de ultramar de España. Una Real Orden firmada en San Ildefonso el 9 de agosto de 1776, designó a la ciudad puerto de San Felipe y Santiago de Montevideo, como Apostadero Naval de la Corona de España, para el Atlántico Sur.
Departamento Naval de Ultramar, que tenía jurisdicción y la defensa del el Río de la Plata, Islas Malvinas, las Aguas Atlánticas, Tierra del Fuego, Estrecho de Magallanes, la ruta al Cabo de Hornos, y sobre todas las tierras e islas por descubrir.
La sola mención de este hecho histórico, le presta a cualquier país bases sólidas y reales, donde fundar sus aspiraciones de soberanía, que le correspondan sobre las Terra Australis Incognita.
Pero no obstante lo anotado, nuestro país en su etapa moderna y actual, ha venido realizando en forma progresiva, a través de su joven historia, acciones que avalan sus aspiraciones sobre la Antártida. Acciones que mencionaremos rápidamente para conocimiento del lector, que debe conocer su historia, porque ella pertenece a la Nación:
1916 Intento de rescate de la expedición inglesa de Shackleton atrapada en la Antártida, por parte del buque de la Armada Nacional, Instituto de Pesca Nº 1 al mando del Teniente de Navío Elichiribehety.
1968 Creación del Instituto Antártico Uruguayo por parte del Profesor Julio Cesar Musso, organismo de carácter privado con la finalidad de impulsar las actividades antárticas nacionales.
1973 presentación en el Parlamento Nacional de sendos proyectos de Ley para regular las actividades Nacionales en la Antártida, una por parte del diputado Salgado y otra por el diputado L.A. Lacalle Herrera.
1975 Por ley Nº 14.416 el Instituto Antártico Uruguayo pasa a la órbita del Estado, específicamente al Ministerio de Defensa, (con representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores y Ministerio de Educación y Cultura) con el objetivo primordial de “formular, evaluar, y efectuar investigaciones y exploraciones científicas y tecnológicas y de servicios en la Antártida paralelo sesenta grados sur.”
1980 Uruguay pasa a ser miembro adherente del Tratado Antártico con voz pero sin voto en dicha organización.
1984 Se establece la primera base antártica nacional, Base Científica Antártica “Artigas” (Lat.62º 11’ Long.58º 51’) en la Isla Rey Jorge perteneciente a las Shetland del Sur.
1985 Uruguay adquiere el carácter de miembro Consultivo Permanente en el Tratado Antártico, con voz y voto, por presentar trabajos científicos de interés para la humanidad y tener abierta una base permanente en la Antártida.
Esta breve historia no exenta de sacrificios personales, humanos, institucionales y del propio Estado que puso los medios materiales que en ese momento tenía a su alcance, para lograr estar en la Antártida y dentro del Tratado, sirve de prolegómeno al problema que expresamos en el título que corona este artículo.
La Antártida es sin ningún lugar a dudas para las naciones del cono sur americano, un desafió geopolítico y geoestratégico de incalculable valor, y por tanto lo es para nuestro País, que forma parte de este subcontinente. El involucramiento del Uruguay, que señalamos, debe ser considerado por la generación de variados hechos que pueden provocar interferencias o beneficios, sobre el País y su población.
Los mismos, van desde defender su subsistencia como sociedad humana, controlando las posibles agresiones al medio ambiente antártico, que influyen por proximidad, en las condiciones de tiempo meteorológico, sobre nuestro territorio y en el mar territorial, que se ve influenciado por las corrientes frías que suben desde el continente blanco.
El control, sobre la explotación de las riquezas ictícolas del Atlántico Sur y Océano Antártico, que pueden distorsionar las propias, que habitan nuestro mar territorial.
Pérdida de permisos de pesca en Aguas Antárticas. Dentro de los recursos vivos del mar, se destaca entre otras especies, peces de gran valor económico. A través del CCRVMA/CCAMLR (Comisión de Conservación de Recursos Marinos Vivos) se administra la pesca sustentable de especies antártica. La misma se realiza con control e inspección de la captura y mediante permisos de pesca en Aguas Antárticas, otorgados a los países miembros en régimen de cuotas y zonas para la pesca de especies de gran valor económico (1 Ton. = US $ 16000). Se estima U S $15 millones por buque y por viaje. Los barcos pesqueros con bandera nacional, obligan a que el capitán del mismo y el 50% de la tripulación sean de nacionalidad uruguaya. Lo que exige empresas legalmente instaladas en el país, que aportan a DGI y BPS. Esto se complementa con observadores internacionales, pertenecientes a DINARA que se intercambian con otras flotas en el control que corresponda en cuotas de captura y áreas de pesca asignadas. El Estado Uruguayo se beneficia además, a través de la DINARA al recibir como impuestos, el 1 por 1000 sobre la pesca producida autofinanciando su actividad y aportando un importante saldo a Rentas Generales
Participar en un futuro no lejano, en el aprovechamiento de las riquezas en minerales, gas, natural e hidrocarburos que contiene el Continente Antártico y su plataforma continental. Por último y no menor por su importancia, colaborar en el control y cuidado del reservorio de agua dulce más grande del planeta.
Esta enumeración, es apenas una muestra representativa de la importancia que significa para nuestro País y su población, el Continente de la Antártida.
La permanencia de todo país como Miembro Permanente, dentro del Tratado Antártico, está signada por el cumplimiento de ciertas obligaciones, tales como:
Concurrir a Reuniones Consultivas desarrolladas anualmente, que atienden la problemática antártica generando resoluciones que deben adoptar los países integrantes del Sistema, así como a las reuniones del SCAR que resuelve en el campo de la ciencia, generando así mismo recomendaciones que deben ser consideradas por los miembros del Sistema.
Mantener activa (abierta) una base científica en el Continente.
Realizar trabajos científicos de provecho para la humanidad.
Estar al día con los pagos a los Organismos Internacionales que integran el Tratado Antártico, tales como el SCAR (Comité Científico de Investigaciones Antárticas ), COMNAP (Consejo de Administradores de Programas Antárticos Nacionales), Secretaría General, etc. es lo que mantiene como ya lo mencionamos a un país dentro del Sistema Antártico.
Durante la presente Administración de Gobierno, en el transcurso del año 2006, el Instituto Antártico Uruguayo, no concurrió a dos foros internacionales, SCAR y COMNAP, debido a razones administrativas de quien depende dicho Instituto, el Ministerio de Defensa Nacional.
Durante el presente año 2007 a partir del 1º de marzo, se está desarrollando el 4º Año Polar, que finaliza en marzo de 2009, evento, que es propiciado por el Consejo Internacional para las Ciencias (ICSU) y la Organización Mundial de Meteorología (OMM) y abarca ambas zonas polares. En anteriores oportunidades se llevaron a cabo estos importantes eventos científicos de carácter internacional, durante los años1882/1883, 1931/1932, 1957/1958, precisamente este último, se conoció como Año Geofísico Internacional y el mismo propició y dio nacimiento al Tratado Antártico.
Hace cincuenta años que no se desarrolla un evento científico internacional, de tal magnitud y nuestro País, todavía ignora su desarrollo, impidiendo por omisión, la participación de su organismo rector, en actividades antárticas nacionales, el Instituto Antártico Uruguayo, en el mismo.
Que como señalamos anteriormente, tiene la obligación de actuar en el seno de todos los eventos que se establecen para los Países Miembros Consultivos del Tratado Antártico, tanto como concurrente o como organizador.
La única intervención que ha tenido nuestro país hasta el momento, en este trascendental acontecimiento científico, fue a iniciativa de la sociedad civil, Asociación Antártica Uruguaya, la presentación de un proyecto de ley por el Diputado Lacalle Pou, declarando de Interés Nacional el Año Polar 2007/2008, presentado el 6 de agosto del presente año 2007.
Según informaciones periodísticas del 17 de octubre de 2007 de la corresponsalía E. F. E.- “El gobierno de Gran Bretaña reclamará ante Naciones Unidas ampliar sus derechos de explotación de las reservas de petróleo, gas y minerales hasta 350 millas náuticas frente al territorio antártico británico”.
Según informaciones mencionadas por Radio Cooperativa de Santiago de Chile, “El canciller Foxley anunció que se reunirá con su par trasandino durante la Cumbre Iberoamericana, para discutir la pretensión británica sobre el continente blanco”.”El titular de Relaciones Exteriores dijo que se entrevistará con su colega trasandino, Jorge Taiana, para delinear una postura común ante la reclamación que hizo ante Naciones Unidas el Reino Unido, que aspira a tener soberanía sobre la Antártica.” Y manifestó textualmente:
"Voy a estar con el canciller de Argentina, y efectivamente uno de los que queremos tocarle al Gobierno argentino es cómo coordinarnos mejor respeto del tema antártico, porque ahí tenemos intereses comunes", detalló. "ambos países tenemos una proyección natural, geopolítica, geoeconómica, geográfica hacia la Antártica y lo natural es que busquemos criterios comunes frente a lo que pudieran ser reclamaciones a futuro de países extraregión, y que tenemos que manejar con un mismo enfoque los países que somos vecinos".
La actividad Antártica que ha venido desarrollando nuestro país por más de veinte años, que ha atravesado horizontalmente distintas administraciones de gobierno, le otorga la categoría de Política de Estado. Su valor geopolítico y geoestratégico, está debidamente probado, no solamente por la importancia que se le fue dando como ya lo mencionamos, por distintos gobiernos nacionales, que enfrentaron diferente coyunturas económicas, sino por la importancia que le otorgan los diferentes actores internacionales, como se puede apreciar en diferentes campos como el científico, económico, geopolítico y geoestratégico. La reclamación realizada por Gran Bretaña de ampliar su soberanía a 350 millas náuticas frente al territorio antártico británico, no solo viola el Tratado Antártico (Artículo IV), que congela las reclamaciones territoriales existentes, sino que alerta y pone en movimiento a los actores regionales como Argentina y Chile, mientras Uruguay hasta donde se sabe, nada ha hecho.
La inactividad a la que está sometido por el Ministerio de Defensa, el Instituto Antártico Uruguayo, que no cumple con sus cometidos específicos, de participar de las distintas reuniones internacionales, para mantenerse dentro del Sistema Antártico, es otro punto de preocupación, al que sumamos la omisión que ha demostrado el Gobierno Nacional ante el desarrollo de un evento científico internacional de relevancia e importancia para la humanidad, como lo es el 4º Cuarto Año Polar.
Como podrá apreciar el lector, los hechos que menciono anteriormente, dan firmeza a lo que se alude en el título del artículo, por omisión - falta de conocimiento - o incapacidad, la indefensión por parte de esta Administración de Gobierno, sobre áreas geopolíticas y geoestratégicas de enorme valor y proyección de futuro para nuestro País, ponen en riesgo la soberanía de la Nación, que por historia y por esfuerzo, tienen sobre las mismas.--
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OPINIONES DE VANGUARDIA
lunes, noviembre 12, 2007
Disputa polar: las nuevas fronteras de la geopolítica
Publicado en www.nuestromar.org
Fuente: La Nación
11Nov07
El peligro creciente del calentamiento global y la escasez de recursos energéticos, en un contexto de petróleo en precio récord, amenazan con derretir las congeladas discusiones sobre la soberanía de los polos.
A principios de agosto, Rusia envió un mini submarino en una misión que agitó las aguas de la diplomacia mundial: el aparato descendió hasta el fondo del océano Ártico, plantó una bandera rusa de titanio en el fondo marino e inauguró sin más un nuevo capítulo en la disputa internacional por los recursos naturales que se esconden bajo el hielo y el agua de los polos. De hecho, al poco tiempo la carrera en el Polo Norte tuvo un reflejo que todavía despierta sospechas en las cancillerías de los gobiernos con intereses en el Polo Sur. A la misión rusa, que generó respuestas casi automáticas de las otras naciones que reclaman sus derechos sobre el Ártico, se sumó, tres semanas atrás, el anuncio británico de formalizar ante las Naciones Unidas un reclamo de soberanía que incluye más de un millón de kilómetros cuadrados de tierra y mar en la región antártica.
La mencionada expedición rusa contó con todos los ingredientes para funcionar como una provocación entre las potencias del Norte. Pero el escenario global también aportó sus condimentos para convertir el episodio en un asunto global: frente a las sombrías perspectivas de un futuro signado por el calentamiento global y la escasez de recursos energéticos, es claro que en las gélidas superficies polares la pugna por su soberanía es sólo la punta de un iceberg que ha comenzado a derretirse por efecto de otro calentamiento: el geopolítico.
De acuerdo con un informe de la US Geological Survey, la oficina norteamericana que entiende sobre hidrocarburos, un cuarto de las reservas petroleras del planeta se hallan debajo del Polo Norte, mientras que su helada superficie concentraría el diez por ciento del patrimonio global de agua dulce.
En el Sur también se especula sobre la existencia de reservas de crudo (sobre todo, en la península reclamada por nuestro país, que coincide en parte con las pretensiones británicas y chilenas), al igual que de grandes depósitos de gas, una enorme variedad de minerales, valiosísimos recursos biológicos y el setenta por ciento del agua dulce del planeta.
Si bien el Tratado Antártico, firmado en 1959, prohíbe por varias décadas la explotación de petróleo, gas y minerales, a menos de que sea por razones de investigación científica, para los expertos resulta evidente que sobre la base de un reclamo histórico Londres busca crear las condiciones para, llegado el momento, poder proclamar su soberanía en el área y, eventualmente, iniciar la extracción de hidrocarburos y minerales.
La Argentina y Chile expresaron de inmediato su rechazo a la acción británica, pero lo cierto es que en esta carrera todos mueven sus piezas de manera de no quedar fuera de juego: también la Argentina presentará ante la ONU su reclamo de soberanía sobre una porción de la Antártida y Chile anunció días atrás su decisión de reabrir una base naval que debió cerrar cinco años atrás por falta de presupuesto.
Salta a la vista que la cuestión energética no es sólo prioridad de las grandes potencias, y que ningún rincón del planeta queda excluido del tablero geoestratégico. "Todos los países hacen sus proyecciones en materia energética. La Argentina también las hace. Sería ingenuo no hacerlo. Dada la prohibición de realizar estudios en la Antártida, los cálculos se realizan tomando como base una serie de marcadores indirectos." El que habla es Mariano Memoli, director del Instituto Antártico Argentino, un organismo que depende de Cancillería y que regula la actividad científica en el continente blanco. Pero las estimaciones oficiales que la oficina maneja en materia de recursos no renovables son un secreto guardado bajo siete llaves: todos los funcionarios y científicos que trabajan en el tema se comprometen a hacerlo bajo un estricto secreto.
Suban sus apuestas
Después de que la misión rusa de agosto pasado confirmara, según el gobierno de Moscú, que el Polo Norte es una continuación de la plataforma continental rusa, Canadá, Dinamarca, Noruega y Estados Unidos, los otros países con ambiciones territoriales en la región, no sólo rechazaron las afirmaciones de Rusia sino que también anunciaron, reafirmaron o reactivaron su actividad en la zona.
Canadá, por ejemplo, mientras discute con los norteamericanos si el estrecho del Noroeste será jurisdiccional o internacional, anunció la construcción de un puerto, el establecimiento de una base militar para entrenar tropas en condiciones de baja temperatura y la expansión de su flota naval.
Para el director de la Comisión de Estudios Antárticos de la Comisión Argentina de Relaciones Internacionales (CARI), Angel Ernesto Molinari, una suma de razones confluyen para este reposicionamiento internacional: "Por efecto del cambio climático, el derretimiento de hielo en el Ártico da lugar a nuevos pasos navegables que interesan a cualquiera de ellos. Además, obviamente, está la posibilidad de la explotación de recursos no renovables, en tiempos en los que el futuro del petróleo genera mucha incertidumbre, y no hay que olvidar que, desde marzo de este año y hasta febrero de 2008, rige el Año Polar Internacional. Esto hace que los países vinculados a los polos desarrollen nuevos proyectos y traten de mostrarse capaces desde lo técnico o lo científico frente al resto".
Durante décadas, el alto costo que implicaba la posible explotación de las reservas polares las convertía en un activo poco interesante. Pero la creciente puja por recursos energéticos -y el precio récord del petróleo, que roza ya los cien dólares- se encargó de cambiar ese escenario y de alterar notablemente la relación costo-beneficio.
Una proyección reciente de la Exxon Mobil Corporation estima que será necesaria una amplia variedad de fuentes de energía para satisfacer la demanda mundial, que según sus cálculos crecerá en un 30 por ciento hacia el año 2030. Para ese entonces, petróleo y gas seguirán abasteciendo un sesenta por ciento del total de la demanda energética.
Dado que las extracciones más sencillas ya han tenido lugar y que buena parte de los yacimientos se encuentran en zonas políticamente inflamables, el ingeniero Jorge Lapeña, presidente del Instituto Argentino de Energía Gral. Mosconi, cree que se ha hecho necesario recurrir a técnicas más complejas de exploración y explotación, incluso en zonas de difícil acceso como son los polos. "Ya no se trata de meras pujas empresariales sino que se han incorporado jugadores más grandes: los propios países, principales interesados en expandir sus fronteras para ampliar la capacidad de producción", explica.
Sydney Weintraub, consultor en política económica del Centro de Estudios Internacionales Estratégicos, de Washington, también cree que esta revitalización de los reclamos por soberanía tiene el color del petróleo. "La posibilidad de hallar nuevas reservas petroleras, especialmente con el alto precio del presente, es la principal razón que motiva a rusos, británicos, canadienses y norteamericanos. No sé cómo se resolverá este tema, pero nadie está dispuesto a ceder su reclamo de soberanía a los rusos sólo porque pusieron una bandera en el fondo del mar."
Una posibilidad para solucionar la disputa en torno al Polo Norte sería el establecimiento de un tratado ártico, a la manera del que rige en la Antártida. Así opina David Carlson, el director del comité científico que organiza el actual Año Polar Internacional. Este oceanógrafo norteamericano también ve en el petróleo una de las principales razones para el reclamo, aunque agrega el potencial de los recursos pesqueros en la región. "Y tampoco descartaría razones más viejas, como el orgullo nacional y el deseo de proclamar poderío tecnológico frente a otros países", agrega.
Investigo, luego reclamo
En el ámbito del derecho internacional circula una máxima que parece inspirada en la actividad científica polar: "Investigo para conocer, conozco para reclamar". Numerosas misiones científicas en ambos extremos del planeta pretenden sustentar con pruebas las reivindicaciones territoriales de cada país. La Argentina no es excepción.
El Instituto Antártico Argentino se encarga de regular las políticas científicas del país en esa zona. El sólo hecho de que el organismo dependa del Ministerio de Relaciones Exteriores aporta alguna pista acerca de la finalidad que persiguen sus investigaciones. Memoli, su director, reconoce que también en nuestro país el interés nacional digita la investigación científica. "Esto es así siempre. Detrás de cada reunión científica internacional hay un interés político", señala.
Dentro de dos años vence el plazo para que nuestro país presente ante la Convención de los Derechos del Mar de la ONU un informe que corrobore científicamente los límites externos de su plataforma submarina. Y aunque el Tratado Antártico haya trabado hasta ahora cualquier reclamo de soberanía, la Argentina también presentará, al igual que Gran Bretaña, sus pretensiones sobre el continente antártico como un recurso diplomático dirigido a dejar asentado su reclamo. Otro tanto harán los otros países que mantienen reclamos de soberanía en la Antártica.
¿Por qué entonces impactó tanto el anuncio británico? "Porque la Argentina tiene un derecho real para reclamar la Antártida. Los británicos, no", sostiene el general (R) Jorge Leal, ex director del Instituto Antártico Argentino y fundador de la base Esperanza, en 1953.
Memoli explica que en Cancillería estaban preparados para algún anuncio británico de este tipo, sobre todo luego de recibir el programa de la reunión del British Antartic Survey que, el 4 de octubre último, se reunió para discutir en Londres sobre la Antártida del futuro. "Allí se tocó, incluso, el tema de la explotación de recursos", reconoce.
En los medios periodísticos se difundió, en cambio, el interés conservacionista británico. "Desde hace tiempo se viene hablando de generar regiones protegidas en aguas internacionales. Habría que preguntarse si, bajo el paraguas de la preservación, los países con recursos para administrar esas regiones no estarían creando nuevas provincias", alerta Memoli.
Pasan varias décadas entre un año polar y otro. Justamente en 1958, último Año Polar Internacional, se firmó el Tratado Antártico, un documento internacional que, en plena Guerra Fría, logró lo que parecía imposible: frenar todo tipo de disputa por soberanía en el Polo Sur.
El tratado estipulaba la prohibición de discutir cláusulas por tres décadas y ese plazo se venció 16 años atrás. ¿Existen ahora, en momentos en que crece la fricción mundial, posibilidades concretas para que en la próxima reunión revisora -que tendrá lugar en Kiev, a mediados del año próximo- se reactiven las discusiones sobre soberanía o explotación de recursos naturales?
"Podría suceder que en esa reunión se busquen flexibilizar los mecanismos para la introducción de reformas en el tratado -analiza Pablo Tettamanti, profesor de Derecho Internacional de la Universidad Torcuato Di Tella-. Pero difícilmente se abra la discusión sobre la explotación de los hidrocarburos. No se puede descartar que algún país lo pretenda, pero sería bastante impopular para cualquier gobierno. Además habilitaría discusiones sobre soberanía y no todas las naciones están interesadas en abrir ese tema".
Frente al evidente descongelamiento de las tensiones mundiales, ¿es razonable pensar que esta competencia por el mejor posicionamiento geopolítico sea el prólogo de la tan temida guerra por los recursos naturales?
La máxima autoridad del Instituto Antártico, Mariano Memoli, no cree que el conflicto se traslade al terreno bélico. "De todas maneras, es claro que la Argentina debe estar bien parada ante un eventual cambio de escenario."
Riquezas en juego
• Polo norte: Se especula que allí se concentra el 25 por ciento de las reservas mundiales de petróleo, al igual que significativas reservas gasíferas. Asimismo, se dice que el diez por ciento del patrimonio mundial de agua dulce está congelado en esa región.
• Polo sur: Aunque la exploración de hidrocarburos está prohibida en el continente antártico, el potencial de la zona es mundialmente conocido. A la riqueza energética se suma la presencia del 70 por ciento del total de agua dulce, así como variedad de minerales y valiosos recursos biológicos. Australia, Chile, Francia, Noruega, Nueva Zelanda, Gran Bretaña y la Argentina mantienen disputas territoriales en la zona.
Por Lorena Oliva
11/11/07
LA NACIÓN
Fuente: La Nación
11Nov07
El peligro creciente del calentamiento global y la escasez de recursos energéticos, en un contexto de petróleo en precio récord, amenazan con derretir las congeladas discusiones sobre la soberanía de los polos.
A principios de agosto, Rusia envió un mini submarino en una misión que agitó las aguas de la diplomacia mundial: el aparato descendió hasta el fondo del océano Ártico, plantó una bandera rusa de titanio en el fondo marino e inauguró sin más un nuevo capítulo en la disputa internacional por los recursos naturales que se esconden bajo el hielo y el agua de los polos. De hecho, al poco tiempo la carrera en el Polo Norte tuvo un reflejo que todavía despierta sospechas en las cancillerías de los gobiernos con intereses en el Polo Sur. A la misión rusa, que generó respuestas casi automáticas de las otras naciones que reclaman sus derechos sobre el Ártico, se sumó, tres semanas atrás, el anuncio británico de formalizar ante las Naciones Unidas un reclamo de soberanía que incluye más de un millón de kilómetros cuadrados de tierra y mar en la región antártica.
La mencionada expedición rusa contó con todos los ingredientes para funcionar como una provocación entre las potencias del Norte. Pero el escenario global también aportó sus condimentos para convertir el episodio en un asunto global: frente a las sombrías perspectivas de un futuro signado por el calentamiento global y la escasez de recursos energéticos, es claro que en las gélidas superficies polares la pugna por su soberanía es sólo la punta de un iceberg que ha comenzado a derretirse por efecto de otro calentamiento: el geopolítico.
De acuerdo con un informe de la US Geological Survey, la oficina norteamericana que entiende sobre hidrocarburos, un cuarto de las reservas petroleras del planeta se hallan debajo del Polo Norte, mientras que su helada superficie concentraría el diez por ciento del patrimonio global de agua dulce.
En el Sur también se especula sobre la existencia de reservas de crudo (sobre todo, en la península reclamada por nuestro país, que coincide en parte con las pretensiones británicas y chilenas), al igual que de grandes depósitos de gas, una enorme variedad de minerales, valiosísimos recursos biológicos y el setenta por ciento del agua dulce del planeta.
Si bien el Tratado Antártico, firmado en 1959, prohíbe por varias décadas la explotación de petróleo, gas y minerales, a menos de que sea por razones de investigación científica, para los expertos resulta evidente que sobre la base de un reclamo histórico Londres busca crear las condiciones para, llegado el momento, poder proclamar su soberanía en el área y, eventualmente, iniciar la extracción de hidrocarburos y minerales.
La Argentina y Chile expresaron de inmediato su rechazo a la acción británica, pero lo cierto es que en esta carrera todos mueven sus piezas de manera de no quedar fuera de juego: también la Argentina presentará ante la ONU su reclamo de soberanía sobre una porción de la Antártida y Chile anunció días atrás su decisión de reabrir una base naval que debió cerrar cinco años atrás por falta de presupuesto.
Salta a la vista que la cuestión energética no es sólo prioridad de las grandes potencias, y que ningún rincón del planeta queda excluido del tablero geoestratégico. "Todos los países hacen sus proyecciones en materia energética. La Argentina también las hace. Sería ingenuo no hacerlo. Dada la prohibición de realizar estudios en la Antártida, los cálculos se realizan tomando como base una serie de marcadores indirectos." El que habla es Mariano Memoli, director del Instituto Antártico Argentino, un organismo que depende de Cancillería y que regula la actividad científica en el continente blanco. Pero las estimaciones oficiales que la oficina maneja en materia de recursos no renovables son un secreto guardado bajo siete llaves: todos los funcionarios y científicos que trabajan en el tema se comprometen a hacerlo bajo un estricto secreto.
Suban sus apuestas
Después de que la misión rusa de agosto pasado confirmara, según el gobierno de Moscú, que el Polo Norte es una continuación de la plataforma continental rusa, Canadá, Dinamarca, Noruega y Estados Unidos, los otros países con ambiciones territoriales en la región, no sólo rechazaron las afirmaciones de Rusia sino que también anunciaron, reafirmaron o reactivaron su actividad en la zona.
Canadá, por ejemplo, mientras discute con los norteamericanos si el estrecho del Noroeste será jurisdiccional o internacional, anunció la construcción de un puerto, el establecimiento de una base militar para entrenar tropas en condiciones de baja temperatura y la expansión de su flota naval.
Para el director de la Comisión de Estudios Antárticos de la Comisión Argentina de Relaciones Internacionales (CARI), Angel Ernesto Molinari, una suma de razones confluyen para este reposicionamiento internacional: "Por efecto del cambio climático, el derretimiento de hielo en el Ártico da lugar a nuevos pasos navegables que interesan a cualquiera de ellos. Además, obviamente, está la posibilidad de la explotación de recursos no renovables, en tiempos en los que el futuro del petróleo genera mucha incertidumbre, y no hay que olvidar que, desde marzo de este año y hasta febrero de 2008, rige el Año Polar Internacional. Esto hace que los países vinculados a los polos desarrollen nuevos proyectos y traten de mostrarse capaces desde lo técnico o lo científico frente al resto".
Durante décadas, el alto costo que implicaba la posible explotación de las reservas polares las convertía en un activo poco interesante. Pero la creciente puja por recursos energéticos -y el precio récord del petróleo, que roza ya los cien dólares- se encargó de cambiar ese escenario y de alterar notablemente la relación costo-beneficio.
Una proyección reciente de la Exxon Mobil Corporation estima que será necesaria una amplia variedad de fuentes de energía para satisfacer la demanda mundial, que según sus cálculos crecerá en un 30 por ciento hacia el año 2030. Para ese entonces, petróleo y gas seguirán abasteciendo un sesenta por ciento del total de la demanda energética.
Dado que las extracciones más sencillas ya han tenido lugar y que buena parte de los yacimientos se encuentran en zonas políticamente inflamables, el ingeniero Jorge Lapeña, presidente del Instituto Argentino de Energía Gral. Mosconi, cree que se ha hecho necesario recurrir a técnicas más complejas de exploración y explotación, incluso en zonas de difícil acceso como son los polos. "Ya no se trata de meras pujas empresariales sino que se han incorporado jugadores más grandes: los propios países, principales interesados en expandir sus fronteras para ampliar la capacidad de producción", explica.
Sydney Weintraub, consultor en política económica del Centro de Estudios Internacionales Estratégicos, de Washington, también cree que esta revitalización de los reclamos por soberanía tiene el color del petróleo. "La posibilidad de hallar nuevas reservas petroleras, especialmente con el alto precio del presente, es la principal razón que motiva a rusos, británicos, canadienses y norteamericanos. No sé cómo se resolverá este tema, pero nadie está dispuesto a ceder su reclamo de soberanía a los rusos sólo porque pusieron una bandera en el fondo del mar."
Una posibilidad para solucionar la disputa en torno al Polo Norte sería el establecimiento de un tratado ártico, a la manera del que rige en la Antártida. Así opina David Carlson, el director del comité científico que organiza el actual Año Polar Internacional. Este oceanógrafo norteamericano también ve en el petróleo una de las principales razones para el reclamo, aunque agrega el potencial de los recursos pesqueros en la región. "Y tampoco descartaría razones más viejas, como el orgullo nacional y el deseo de proclamar poderío tecnológico frente a otros países", agrega.
Investigo, luego reclamo
En el ámbito del derecho internacional circula una máxima que parece inspirada en la actividad científica polar: "Investigo para conocer, conozco para reclamar". Numerosas misiones científicas en ambos extremos del planeta pretenden sustentar con pruebas las reivindicaciones territoriales de cada país. La Argentina no es excepción.
El Instituto Antártico Argentino se encarga de regular las políticas científicas del país en esa zona. El sólo hecho de que el organismo dependa del Ministerio de Relaciones Exteriores aporta alguna pista acerca de la finalidad que persiguen sus investigaciones. Memoli, su director, reconoce que también en nuestro país el interés nacional digita la investigación científica. "Esto es así siempre. Detrás de cada reunión científica internacional hay un interés político", señala.
Dentro de dos años vence el plazo para que nuestro país presente ante la Convención de los Derechos del Mar de la ONU un informe que corrobore científicamente los límites externos de su plataforma submarina. Y aunque el Tratado Antártico haya trabado hasta ahora cualquier reclamo de soberanía, la Argentina también presentará, al igual que Gran Bretaña, sus pretensiones sobre el continente antártico como un recurso diplomático dirigido a dejar asentado su reclamo. Otro tanto harán los otros países que mantienen reclamos de soberanía en la Antártica.
¿Por qué entonces impactó tanto el anuncio británico? "Porque la Argentina tiene un derecho real para reclamar la Antártida. Los británicos, no", sostiene el general (R) Jorge Leal, ex director del Instituto Antártico Argentino y fundador de la base Esperanza, en 1953.
Memoli explica que en Cancillería estaban preparados para algún anuncio británico de este tipo, sobre todo luego de recibir el programa de la reunión del British Antartic Survey que, el 4 de octubre último, se reunió para discutir en Londres sobre la Antártida del futuro. "Allí se tocó, incluso, el tema de la explotación de recursos", reconoce.
En los medios periodísticos se difundió, en cambio, el interés conservacionista británico. "Desde hace tiempo se viene hablando de generar regiones protegidas en aguas internacionales. Habría que preguntarse si, bajo el paraguas de la preservación, los países con recursos para administrar esas regiones no estarían creando nuevas provincias", alerta Memoli.
Pasan varias décadas entre un año polar y otro. Justamente en 1958, último Año Polar Internacional, se firmó el Tratado Antártico, un documento internacional que, en plena Guerra Fría, logró lo que parecía imposible: frenar todo tipo de disputa por soberanía en el Polo Sur.
El tratado estipulaba la prohibición de discutir cláusulas por tres décadas y ese plazo se venció 16 años atrás. ¿Existen ahora, en momentos en que crece la fricción mundial, posibilidades concretas para que en la próxima reunión revisora -que tendrá lugar en Kiev, a mediados del año próximo- se reactiven las discusiones sobre soberanía o explotación de recursos naturales?
"Podría suceder que en esa reunión se busquen flexibilizar los mecanismos para la introducción de reformas en el tratado -analiza Pablo Tettamanti, profesor de Derecho Internacional de la Universidad Torcuato Di Tella-. Pero difícilmente se abra la discusión sobre la explotación de los hidrocarburos. No se puede descartar que algún país lo pretenda, pero sería bastante impopular para cualquier gobierno. Además habilitaría discusiones sobre soberanía y no todas las naciones están interesadas en abrir ese tema".
Frente al evidente descongelamiento de las tensiones mundiales, ¿es razonable pensar que esta competencia por el mejor posicionamiento geopolítico sea el prólogo de la tan temida guerra por los recursos naturales?
La máxima autoridad del Instituto Antártico, Mariano Memoli, no cree que el conflicto se traslade al terreno bélico. "De todas maneras, es claro que la Argentina debe estar bien parada ante un eventual cambio de escenario."
Riquezas en juego
• Polo norte: Se especula que allí se concentra el 25 por ciento de las reservas mundiales de petróleo, al igual que significativas reservas gasíferas. Asimismo, se dice que el diez por ciento del patrimonio mundial de agua dulce está congelado en esa región.
• Polo sur: Aunque la exploración de hidrocarburos está prohibida en el continente antártico, el potencial de la zona es mundialmente conocido. A la riqueza energética se suma la presencia del 70 por ciento del total de agua dulce, así como variedad de minerales y valiosos recursos biológicos. Australia, Chile, Francia, Noruega, Nueva Zelanda, Gran Bretaña y la Argentina mantienen disputas territoriales en la zona.
Por Lorena Oliva
11/11/07
LA NACIÓN
domingo, noviembre 11, 2007
Chile aumentará su presencia permanente en la Antártida
Publicado en www.laprensaaustral.cl
Rompehielos Viel se queda en la zona.
Armada reactiva presencia durante todo el año en el territorio antártico
- Institución edificará gobernación marítima en Bahía Fildes y reconstruirá base Prat. Campaña Antártica de Verano se extenderá del 12 de noviembre al 31 de marzo de 2008
La Armada de Chile aumentará su presencia permanente en la Antártida durante la Campaña Antártica de Verano 2007-2008, para contribuir a mantener y reforzar los intereses nacionales en dicho territorio.
Esto fue resaltado el viernes en una rueda de prensa a bordo del rompehielos Viel, ofrecida por el comandante en jefe de la III Zona Naval, contralmirante Edmundo González, y el comandante del buque, capitán de navío Julián Bilbao. También estuvo presente el comandante del remolcador de alta mar Lautaro, capitán de corbeta Claudio Carrasco.
González destacó que la Armada tendrá una presencia más intensa en la Antártida al recuperar lo que históricamente tuvo siempre, junto con aumentar con lo que cuentan en el presente: “a contar del próximo año la Armada va a tener tres bases de presencia permanente, la primera con este buque, que es una tremenda base de apoyo flexible logístico, de investigación, prospección y patrullaje marítimo”.
Además modernizarán la antigua capitanía de puerto que mantienen en Bahía Fildes para transformarla en una gobernación marítima moderna, “con un gobernador marítimo y un edificio a la altura de los tiempos, con tecnología de punta a través de la red Datamar (que tiene la Dirección General del Territorio Marítimo), y prestar apoyo a operadores nacionales e internacionales que lo soliciten”.
Además figura la reapertura de la base Arturo Prat, en un esfuerzo conjunto con el gobierno regional y el Inach: “este punto, que años atrás creímos que estaba fuera del interés de los buques turísticos y la investigación científica, con el auge de estas dos actividades ha vuelto a estar en boga y nos obliga a tener una presencia no estival sino permanente durante todo el año en la isla Greenwich”.
Adicionalmente tendrán presencia estival en la capitanía de puerto de Bahía Paraíso (en conjunto con la Fuerza Aérea) y una alcaldía de mar en rada Covadonga (en las inmediaciones de la base O’Higgins).
Apoyo y soberanía
El lunes está previsto el zarpe del Viel al continente blanco, para dar inicio a la presente campaña, que se prolongará hasta el 31 de marzo. Este año se cumplirán siete comisiones antárticas, cinco de las cuales estarán a cargo del rompehielos, dándole apoyo logístico a operadores antárticos nacionales y extranjeros.
El ATF Lautaro integrará en forma alternada la Patrulla Antártica Naval Combinada con la Armada Argentina. La III Zona Naval además aportará el remolcador Leucotón.
A contar del 1º de enero de 2008, el Viel cambiará de puerto base y pasará a estar subordinado en forma permanente a la III Zona Naval, con puerto base en Punta Arenas.
En términos estadísticos, esta nueva campaña considera cubrir sobre 23 mil millas náuticas, 90 horas de vuelo (el Viel lleva dos helicópteros Bolkow), el transporte de mil 183 toneladas de carga general y de mil 223 metros cúbicos de combustible.
El capitán de navío Julián Bilbao señaló que el navío brindará apoyo logístico en carga y combustible a las Fuerzas Armadas, el Instituto Antártico Chileno (Inach), Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Alemania, Ucrania, Ecuador, España, Uruguay, Argentina y la República Checa.
Resaltó además el contribuir a la ciencia nacional, la actividad hidrográfica y batimétrica, la mantención de la señalización marítima, de un ambiente libre de contaminación y salvaguardar la vida humana en el mar. En este último tema figuró el 1º de febrero de 2007 el apoyo ante la emergencia al crucero Nordkapp saliendo de isla Decepción.
También brindarán apoyo médico, dental y religioso a las dotaciones antárticas, así como alguna evacuación de personas si fuera necesario.
De manera especial, subrayó el hacer presencia y soberanía en las grandes extensiones del continente blanco.
LPA
Rompehielos Viel se queda en la zona.
Armada reactiva presencia durante todo el año en el territorio antártico
- Institución edificará gobernación marítima en Bahía Fildes y reconstruirá base Prat. Campaña Antártica de Verano se extenderá del 12 de noviembre al 31 de marzo de 2008
La Armada de Chile aumentará su presencia permanente en la Antártida durante la Campaña Antártica de Verano 2007-2008, para contribuir a mantener y reforzar los intereses nacionales en dicho territorio.
Esto fue resaltado el viernes en una rueda de prensa a bordo del rompehielos Viel, ofrecida por el comandante en jefe de la III Zona Naval, contralmirante Edmundo González, y el comandante del buque, capitán de navío Julián Bilbao. También estuvo presente el comandante del remolcador de alta mar Lautaro, capitán de corbeta Claudio Carrasco.
González destacó que la Armada tendrá una presencia más intensa en la Antártida al recuperar lo que históricamente tuvo siempre, junto con aumentar con lo que cuentan en el presente: “a contar del próximo año la Armada va a tener tres bases de presencia permanente, la primera con este buque, que es una tremenda base de apoyo flexible logístico, de investigación, prospección y patrullaje marítimo”.
Además modernizarán la antigua capitanía de puerto que mantienen en Bahía Fildes para transformarla en una gobernación marítima moderna, “con un gobernador marítimo y un edificio a la altura de los tiempos, con tecnología de punta a través de la red Datamar (que tiene la Dirección General del Territorio Marítimo), y prestar apoyo a operadores nacionales e internacionales que lo soliciten”.
Además figura la reapertura de la base Arturo Prat, en un esfuerzo conjunto con el gobierno regional y el Inach: “este punto, que años atrás creímos que estaba fuera del interés de los buques turísticos y la investigación científica, con el auge de estas dos actividades ha vuelto a estar en boga y nos obliga a tener una presencia no estival sino permanente durante todo el año en la isla Greenwich”.
Adicionalmente tendrán presencia estival en la capitanía de puerto de Bahía Paraíso (en conjunto con la Fuerza Aérea) y una alcaldía de mar en rada Covadonga (en las inmediaciones de la base O’Higgins).
Apoyo y soberanía
El lunes está previsto el zarpe del Viel al continente blanco, para dar inicio a la presente campaña, que se prolongará hasta el 31 de marzo. Este año se cumplirán siete comisiones antárticas, cinco de las cuales estarán a cargo del rompehielos, dándole apoyo logístico a operadores antárticos nacionales y extranjeros.
El ATF Lautaro integrará en forma alternada la Patrulla Antártica Naval Combinada con la Armada Argentina. La III Zona Naval además aportará el remolcador Leucotón.
A contar del 1º de enero de 2008, el Viel cambiará de puerto base y pasará a estar subordinado en forma permanente a la III Zona Naval, con puerto base en Punta Arenas.
En términos estadísticos, esta nueva campaña considera cubrir sobre 23 mil millas náuticas, 90 horas de vuelo (el Viel lleva dos helicópteros Bolkow), el transporte de mil 183 toneladas de carga general y de mil 223 metros cúbicos de combustible.
El capitán de navío Julián Bilbao señaló que el navío brindará apoyo logístico en carga y combustible a las Fuerzas Armadas, el Instituto Antártico Chileno (Inach), Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Alemania, Ucrania, Ecuador, España, Uruguay, Argentina y la República Checa.
Resaltó además el contribuir a la ciencia nacional, la actividad hidrográfica y batimétrica, la mantención de la señalización marítima, de un ambiente libre de contaminación y salvaguardar la vida humana en el mar. En este último tema figuró el 1º de febrero de 2007 el apoyo ante la emergencia al crucero Nordkapp saliendo de isla Decepción.
También brindarán apoyo médico, dental y religioso a las dotaciones antárticas, así como alguna evacuación de personas si fuera necesario.
De manera especial, subrayó el hacer presencia y soberanía en las grandes extensiones del continente blanco.
LPA
sábado, noviembre 10, 2007
Ban Ki-Moon alerta del calentamiento global desde la Antártida
Publicado en http://afp.google.com
10 nov07
Ban Ki-Moon, en la Antártida
Foto: AFP
ISLA REY JORGE, Antártida (AFP) — El continente antártico, que con todo el rigor de su frío es, sin embargo, el más castigado por el calentamiento global, fue el destino que el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, escogió para lanzar su voz de alerta sobre un problema en ascenso.
Ban aceptó sin vacilar una invitación del gobierno chileno a la base Presidente Eduardo Frei, en la Isla Rey Jorge, a mil kilómetros del extremo sur de América, para ver los daños que comienza a causar el alza de la temperatura en los -hasta ahora- invulnerables hielos de esta vasta región, un remanso de 14 millones de km2 donde la nieve y la paz son los únicos amos.
"No estoy aquí para hacer eco-turismo, estoy aquí como mensajero de todas las advertencias sobre el cambio climático", y "para observar el impacto del fenómeno, ver por mí mismo y aprender todo lo que pueda sobre lo que sucede en la Antártida y en realidad en el resto del mundo", dijo Ban tras dar sus primeros pasos en la pista aérea de la base Frei, enfundado en una chaqueta roja y azul que se calzó en el C-130 de la Fuerza Aérea Chilena.
Los expertos en ecología de Chile lo habían puesto al día, durante el viaje de dos horas y media desde la ciudad patagónica de Punta Arenas, de las tristes novedades que ofrece el derretimiento de los glaciares de la Antártida y el sur de los Andes.
La plataforma Larsen, por ejemplo, era una masa de hielo marino de 400 km2 que desapareció en veinte días. Otro fatídico sitio antártico, el glaciar Hannah Point, retrocedió 120 metros, aunque se tomó varios años.
Pero un recorrido aéreo en un Twin Oter bimotor fue incluso más eficaz en el objetivo didáctico de la expedición del secretario general de la ONU. Desde las alturas observó la belleza de estas latitudes, donde miles de témpanos flotan a la deriva con el fondo salpicado de elevaciones rocosas.
Y también observó la evidencia de un mal en curso, al aterrizar sobre la resbaladiza superficie del glaciar Collins, cerca de la base Frei, que cada año se reduce diez metros de fondo y un metro de altura. Tal como sintetizó un científico que viajaba con Ban, el glaciar "pierde por todos lados".
"Todo lo que he visto es extraordinariamente hermoso, pero al mismo tiempo es inquietante", dijo Ban. "He visto el derretimiento de los glaciares. Los glaciares de la Isla Rey Jorge se han reducido un 10% recientemente. Si la comunidad internacional hace algo ahora vamos a poder detener el avance del calentamiento global".
Ban sobrevoló varias de las once bases y refugios de otros tantos países asentadas en la Isla Rey Jorge. Son pequeñas comunidades donde trabajan efectivos de la fuerza aérea, científicos, médicos y otros profesionales a cargo de los respectivos estados.
Y una de ellas es la base coreana de Sejong, que el también coreano Ban tuvo la satisfacción de visitar, después de atravesar en lancha una breve bahía que lo separaba de sus felices anfitriones.
Allí lo agasajaron con sonrisas, discursos y ceremoniosos saludos, además de un buffet de camarones y otros frutos de mar. Lo más sustancioso fue, sin embargo, la charla que sostuvo con los científicos de la base, que lo informaron sobre sus investigaciones del cambio climático.
"Tenemos los recursos, tenemos la tecnología, tenemos el dinero", dijo Ban de regreso a la base Eduardo Frei y antes de salir de nuevo hacia Chile, con los motores del C-130 rugiendo a sus espaldas. "Todo lo que falta es voluntad política. El objetivo principal de mi visita es galvanizar esa voluntad política. Necesito una respuesta política. Esta es una emergencia, y para una situación de emergencia necesitamos acciones de emergencia".
Visita del Secretario General de la ONU a la Antártida
Ban Ki-moon recorrió bases de tres países como parte de su interés por el calentamiento global y el derretimiento de los glaciares.
Publicado en www.milenio.com
Secretario general de ONU viaja a la Antártida
09-Noviembre-07
Punta Arenas, Chile.-El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, visitó el viernes la Antártida y recorrió bases de tres países como parte de su interés por el calentamiento global y el derretimiento de los glaciares.
Ban Ki-moon viajó en un avión C130 de la fuerza aérea chilena acompañado por funcionarios chilenos, entre ellos la ministra del Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, hasta la ciudad austral de Punta Arenas, desde donde otra aeronave similar lo llevó hasta la base Presidente Eduardo Frei, de la Fuerza Aérea chilena.
En la base fue recibido por el personal estacionado allí, con el que departió animadamente antes de trasladarse a la pequeña base vecina del Uruguay, que sólo cuenta con siete ocupantes.
Desde allí, fue trasladado en una embarcación tipo zodiac hasta la base de Corea del Sur, su país natal, donde se le ofreció una recepción que incluyó comida típica coreana. Emprendió la visita al continente helado luego de asistir el viernes a la inauguración de la Cumbre Iberoamericana.
AP
Publicado en www.milenio.com
Secretario general de ONU viaja a la Antártida
09-Noviembre-07
Punta Arenas, Chile.-El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, visitó el viernes la Antártida y recorrió bases de tres países como parte de su interés por el calentamiento global y el derretimiento de los glaciares.
Ban Ki-moon viajó en un avión C130 de la fuerza aérea chilena acompañado por funcionarios chilenos, entre ellos la ministra del Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, hasta la ciudad austral de Punta Arenas, desde donde otra aeronave similar lo llevó hasta la base Presidente Eduardo Frei, de la Fuerza Aérea chilena.
En la base fue recibido por el personal estacionado allí, con el que departió animadamente antes de trasladarse a la pequeña base vecina del Uruguay, que sólo cuenta con siete ocupantes.
Desde allí, fue trasladado en una embarcación tipo zodiac hasta la base de Corea del Sur, su país natal, donde se le ofreció una recepción que incluyó comida típica coreana. Emprendió la visita al continente helado luego de asistir el viernes a la inauguración de la Cumbre Iberoamericana.
AP
jueves, noviembre 08, 2007
El buque Hespérides zarpa a la Antártida
El buque Hespérides zarpa este sábado de Cartagena para iniciar la Campaña Antártica
Publicado en www.diariosigloxxi.com
Redacción / EP
El Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) de la Armada Hespérides zarpará el próximo sábado, 10 de noviembre, desde su base en Cartagena (Murcia) para realizar una nueva Campaña Antártica, la decimoquinta de su historia.
Según informó en comunicado la Armada, el acto de despedida tendrá lugar a las 11.00 horas en el muelle de Armamento de Navantia y será presidido por el jefe de la Fuerza de Acción Marítima, almirante Juan Carlos Muñoz Delgado y Díaz del Río.
El Hespérides participará en cinco proyectos científicos, dos en el Océano Atlántico y tres en la zona antártica, y finalizará la campaña en mayo del próximo año.
Desde mediados de noviembre y durante un mes, el buque de la Armada realizará la primera parte de un proyecto biológico en el Atlántico Sur denominado TRYNITOP. Tras una escala en Buenos Aires prevista a mediados de diciembre, pondrá rumbo a la ciudad argentina de Ushuaia, en Tierra del Fuego, un puerto de referencia para los traslados hasta la Antártida y en el que permanecerá hasta principios de enero.
A partir de entonces darán comienzo tres proyectos en la zona antártica: el hidrográfico ESASSI y los sísmicos SCAN y VOLDETEC. Tanto el ESASSI como el SCAN forman parte de la contribución española a las actividades del Año Polar Internacional.
Finalizado el proyecto VOLDETEC a principios de marzo, el Hespérides recalará en el puerto chileno de Punta Arenas e iniciará un segundo proyecto biológico, el BLOOM. El BIO de la Armada realizará a finales de marzo una última escala en el continente americano, en el Mar del Plata, y desarrollará a partir de abril la segunda parte del proyecto TRYNITOP.
Publicado en www.diariosigloxxi.com
Redacción / EP
El Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) de la Armada Hespérides zarpará el próximo sábado, 10 de noviembre, desde su base en Cartagena (Murcia) para realizar una nueva Campaña Antártica, la decimoquinta de su historia.
Según informó en comunicado la Armada, el acto de despedida tendrá lugar a las 11.00 horas en el muelle de Armamento de Navantia y será presidido por el jefe de la Fuerza de Acción Marítima, almirante Juan Carlos Muñoz Delgado y Díaz del Río.
El Hespérides participará en cinco proyectos científicos, dos en el Océano Atlántico y tres en la zona antártica, y finalizará la campaña en mayo del próximo año.
Desde mediados de noviembre y durante un mes, el buque de la Armada realizará la primera parte de un proyecto biológico en el Atlántico Sur denominado TRYNITOP. Tras una escala en Buenos Aires prevista a mediados de diciembre, pondrá rumbo a la ciudad argentina de Ushuaia, en Tierra del Fuego, un puerto de referencia para los traslados hasta la Antártida y en el que permanecerá hasta principios de enero.
A partir de entonces darán comienzo tres proyectos en la zona antártica: el hidrográfico ESASSI y los sísmicos SCAN y VOLDETEC. Tanto el ESASSI como el SCAN forman parte de la contribución española a las actividades del Año Polar Internacional.
Finalizado el proyecto VOLDETEC a principios de marzo, el Hespérides recalará en el puerto chileno de Punta Arenas e iniciará un segundo proyecto biológico, el BLOOM. El BIO de la Armada realizará a finales de marzo una última escala en el continente americano, en el Mar del Plata, y desarrollará a partir de abril la segunda parte del proyecto TRYNITOP.
Chile anuncia concurso de pintura infantil: “Regálale tu color a la Antártica”
Chile: SE CELEBRO DIA NACIONAL DEL CONTINENTE BLANCO
Publicado en www.laprensaaustral.cl
5nov07
Anuncian US$4 millones para proyectos científicos en la Antártida.
- El Inach y la Junji invitaron a niños y niñas a enviar postales a líderes mundiales y a pintar el territorio helado en un concurso de dibujo.
Importantes anuncios sobre inversiones antárticas hará esta mañana la intendenta Eugenia Mancilla, en una ceremonia a realizarse a las 11,20 horas en el Inach. Se destinarán 4 millones de dólares para promover proyectos de biotecnología en el continente blanco, en un programa que se ejecutará por cuatro años. Con esta acción se busca potenciar la presencia chilena en dicho territorio.
En la jornada de ayer, un afiche gigante de Papelucho con el mensaje: “la Antártica es parte de nuestra identidad, tú súmate a explorarla”, dieron la tónica al Día de la Antártica Chilena, que fue celebrado en grande por el Instituto Antártico Chileno (Inach), con la presencia de 200 párvulos magallánicos y la participación de diversas instituciones de gobierno.
La actividad buscó acercar e integrar a los más pequeños con el “sexto continente”, al celebrarse un nuevo aniversario desde la dictación del decreto que fijó los límites del territorio chileno en el continente blanco, hecho ocurrido el 6 de noviembre de 1940. En el frontis del edificio del Inach, 200 niños y niñas de establecimientos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) depositaron tarjetas postales de la Antártida en un buzón de Correos Chile, dirigidas a Presidentes de distintas naciones del mundo. Esta actividad contó con una especial motivación de Daniel Torres, investigador del instituto, desde un balcón del tradicional inmueble.
El evento fue encabezado por la intendenta Eugenia Mancilla, quien resaltó tres ejes de la presencia nacional en el territorio antártico: la obtención de recursos Innova Corfo por el Inach como fondo especial para investigación científica en la Antártida (surgida en la mesa de ciencia y tecnología de los Diálogos Regionales); el trabajo con la Armada y el Inach para establecer un convenio de operación por 20 años en la base Prat; y esfuerzos mutisectoriales para generar en Punta Arenas una plataforma logística antártica (estudio Sercotec-Inach). A ello sumó la futura instalación de un museo interactivo antártico dentro del futuro proyecto Costanera.
CONCURSO INEDITO
En el marco de la celebración, el Inach y la Junji invitaron a más de 15 mil párvulos de 4 a 6 años del país, pertenecientes a la Junji, a participar del Primer Concurso de Dibujo Infantil “Regálale tu color a la Antártica”. Este premiará con un viaje al continente blanco a los tres ganadores, junto a sus padres y educadoras.
Ruth Simeone, directora regional de la Junji, destacó que este 6 de noviembre todos los jardines de la institución en el país realizaron actividades de celebración por el Día de la Antártica Chilena, para promover en los niños y niñas chilenos los valores antárticos.
El Dr. José Retamales, director del Inach y del Consejo de Directores de Programas Antárticos Nacionales (Comnap), resaltó esta alianza con la Junji como un gran paso para construir una “cultura país” que valorice la ciencia antártica: “con estos gestos Chile es uno de los primeros países -sino el primero- en el mundo en trabajar la ciencia antártica a este nivel”. Destacó que esta idea, junto a la de la Feria Antártica Escolar despertaron la curiosidad e interés de sus pares de Gran Bretaña. Destacó que potenciar su labor de difusión desde Punta Arenas no es un desafío menor y esperan seguir multiplicando este esfuerzo en el país.
Fuente: LPA
Publicado en www.laprensaaustral.cl
5nov07
Anuncian US$4 millones para proyectos científicos en la Antártida.
- El Inach y la Junji invitaron a niños y niñas a enviar postales a líderes mundiales y a pintar el territorio helado en un concurso de dibujo.
Importantes anuncios sobre inversiones antárticas hará esta mañana la intendenta Eugenia Mancilla, en una ceremonia a realizarse a las 11,20 horas en el Inach. Se destinarán 4 millones de dólares para promover proyectos de biotecnología en el continente blanco, en un programa que se ejecutará por cuatro años. Con esta acción se busca potenciar la presencia chilena en dicho territorio.
En la jornada de ayer, un afiche gigante de Papelucho con el mensaje: “la Antártica es parte de nuestra identidad, tú súmate a explorarla”, dieron la tónica al Día de la Antártica Chilena, que fue celebrado en grande por el Instituto Antártico Chileno (Inach), con la presencia de 200 párvulos magallánicos y la participación de diversas instituciones de gobierno.
La actividad buscó acercar e integrar a los más pequeños con el “sexto continente”, al celebrarse un nuevo aniversario desde la dictación del decreto que fijó los límites del territorio chileno en el continente blanco, hecho ocurrido el 6 de noviembre de 1940. En el frontis del edificio del Inach, 200 niños y niñas de establecimientos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) depositaron tarjetas postales de la Antártida en un buzón de Correos Chile, dirigidas a Presidentes de distintas naciones del mundo. Esta actividad contó con una especial motivación de Daniel Torres, investigador del instituto, desde un balcón del tradicional inmueble.
El evento fue encabezado por la intendenta Eugenia Mancilla, quien resaltó tres ejes de la presencia nacional en el territorio antártico: la obtención de recursos Innova Corfo por el Inach como fondo especial para investigación científica en la Antártida (surgida en la mesa de ciencia y tecnología de los Diálogos Regionales); el trabajo con la Armada y el Inach para establecer un convenio de operación por 20 años en la base Prat; y esfuerzos mutisectoriales para generar en Punta Arenas una plataforma logística antártica (estudio Sercotec-Inach). A ello sumó la futura instalación de un museo interactivo antártico dentro del futuro proyecto Costanera.
CONCURSO INEDITO
En el marco de la celebración, el Inach y la Junji invitaron a más de 15 mil párvulos de 4 a 6 años del país, pertenecientes a la Junji, a participar del Primer Concurso de Dibujo Infantil “Regálale tu color a la Antártica”. Este premiará con un viaje al continente blanco a los tres ganadores, junto a sus padres y educadoras.
Ruth Simeone, directora regional de la Junji, destacó que este 6 de noviembre todos los jardines de la institución en el país realizaron actividades de celebración por el Día de la Antártica Chilena, para promover en los niños y niñas chilenos los valores antárticos.
El Dr. José Retamales, director del Inach y del Consejo de Directores de Programas Antárticos Nacionales (Comnap), resaltó esta alianza con la Junji como un gran paso para construir una “cultura país” que valorice la ciencia antártica: “con estos gestos Chile es uno de los primeros países -sino el primero- en el mundo en trabajar la ciencia antártica a este nivel”. Destacó que esta idea, junto a la de la Feria Antártica Escolar despertaron la curiosidad e interés de sus pares de Gran Bretaña. Destacó que potenciar su labor de difusión desde Punta Arenas no es un desafío menor y esperan seguir multiplicando este esfuerzo en el país.
Fuente: LPA
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