jueves, diciembre 01, 2005

Preparativos para el Año Polar 2007 - 2008

por ALICIA RIVERA - Madrid
EL PAÍS - 30-11-2005
http://www.elpais.es
Dicen los científicos que el conocimiento de los polos, la exploración e investigación en los últimos 200 años, debe mucho a los periodos álgidos de trabajo motivados por los años internacionales, celebrados en 1882-83, 1932-33 y 1957-58, cuando se concentraron los esfuerzos de centenares de investigadores de todo el mundo para penetrar en las difíciles regiones del Ártico y de la Antártida. La próxima cita, convocada por la Unión Científica Internacional (ICSU) y la Organización Mundial de Meteorología (OMM), tiene ya fecha oficial: desde marzo de 2007 hasta marzo de 2009. Más de mil proyectos científicos se han presentado para su desarrollo en las campañas del próximo Año Polar Internacional 2007-2008 (IPY, en sus siglas inglesas), entre los que se seleccionarán finalmente unos 200 grandes programas. Varios países han adjudicado ya fondos para su desarrollo y unos cincuenta participan en la iniciativa.
David J. Carlson, director del programa del Año Polar, con sede en el Consejo Antártico Británico, comenta que científicos de numerosas disciplinas "se han apuntado a esta empresa porque comparten la sensación de que, si no prestamos una considerable atención a los polos ahora, habremos perdido una gran oportunidad y habremos eludido nuestras responsabilidades como exploradores del planeta".
Físicos de la atmósfera, meteorólogos, químicos, biólogos, ingenieros, oceanógrafos, expertos en teledetección, pero también especialistas de disciplinas sociales que se interesan por los pueblos indígenas del Ártico, preparan sus estudios y, sobre todo, se coordinan para optimizar recursos y resultados.
La Unión Europea, que mantiene varios grandes proyectos científicos en la Antártida y en el Ártico, ha lanzado dos nuevos programas enfocados hacia el cambio climático. Uno es Damocles, un consorcio de 45 organizaciones científicas, que se desarrollará durante cinco años, con un presupuesto de 16 millones de euros, explicó Gerard Jugie, presidente del Comité Polar Europeo, en la conferencia CER 2005, celebrada en Bruselas recientemente.
El objetivo de Damocles es instalar y ensayar sistemas multitecnológicos para realizar observaciones casi en tiempo real de variables relacionadas con el clima, desde las condiciones atmosféricas en el Ártico hasta el grosor de la capa de hielo antártica, o las fluctuaciones de la temperatura y salinidad de las aguas oceánicas. El segundo nuevo proyecto de la UE es IPY-Care, dedicado al clima del Ártico y su efecto en Europa, que agrupa a 19 instituciones científicas de 13 países, incluido Rusia. Sin embargo, no se ha definido aún una financiación específica de la Comisión Europea para investigación en el año polar, y mucho depende en este aspecto clave de los presupuestos de I+D de la UE que se aprueben ahora.
Jugie recalcó que la investigación polar se basa en un triángulo con la ciencia en la cúspide, pero que se asienta en las políticas, que pueden aunar tecnologías e infraestructuras logísticas. Bases y buques oceanográficos son la espina dorsal de la investigación polar y Europa estudia la construcción de un nuevo barco científico avanzado, muy específico para estudios geofísicos. Se trata del Aurora Borealis, un rompehielos capaz de hacer perforaciones profundas en el fondo oceánico en zonas donde los icebergs y los hielos suponen una amenaza. El Aurora Borealis es una propuesta de Alemania y, si su construcción recibe la luz verde, podría ser un barco europeo a disposición de los científicos de los países participantes en el proyecto.
El grupo de planificación del IPY ha definido seis grandes áreas de investigación como prioridades para 2007-2008. El adelgazamiento de la capa de ozono, el derretimiento o no de los hielos antárticos, la profundidad del permafrost o los ecosistemas marinos recibirán especial atención en el año polar. "Los proyectos del IPY pueden mostrar al mundo por qué lo que sucede en esos remotos y duros lugares está íntimamente conectado con nuestro pasado, presente y futuro, y así puede atraer a una nueva generación de científicos hacia la investigación polar", ha declarado el australiano Ian Allison, codirector del comité conjunto ICSU-OMM para la planificación científica.
Además, tanto en la Antártida como en el Ártico se vienen desarrollando proyectos científicos de muy alto nivel aprovechando las condiciones óptimas de pureza del aire, la situación o o la existencia de ingentes cantidades de hielo prístino para realizar, por ejemplo, estudios cosmológicos, como observar en el cielo la radiación de fondo del Big Bang o detectar neutrinos. Todo ello también se impulsará en 2007-2008.
España, que tiene dos bases científicas en la Antártida, está a punto de hacer pública una convocatoria de proyectos de investigación específica para el IPY, pero no se sabe aún qué financiación tendrá, informa Margarita Yela, presidenta del Comité Nacional del Año Polar Internacional. Además, en el calendario del buque oceanográfico Hespérides se han reservado dos meses de trabajo en el Ártico en 2007. Será su primera visita a las altas latitudes septentrionales, ya que realiza sus campañas anuales en la Antártida.
Algunos investigadores españoles ya están trabajando en programas del IPY de otros países. Por ejemplo, José Abel Flores, del Departamento de Geología de la Universidad de Salamanca, colabora en el proyecto Bipomac, del programa alemán para el IPY, cuyo objetivo es realizar perforaciones en el fondo marino para estudiar el clima del pasado, hasta hace unos 600.000 años (y los últimos 130.000 con alta resolución), relacionando los procesos en los dos hemisferios, explica Flores. Bipomac hará perforaciones en el océano austral, en el sector subártico.
La UE recuerda que en el Año Polar de 1882-83 se hicieron 13 expediciones al Ártico y dos a la Antártida; en 1932-33, el esfuerzo internacional permitió establecer 114 estaciones de observación árticas y se puso en marcha la instalación de la primera base en el interior de la Antártida. En el Año Geofísico Internacional 1957-58 12 países colaboraron para montar 45 bases en el continente blanco y en islas subantárticas, y se preparó el camino para la firma, el 1 de diciembre de 1959, del Tratado Antártico, que declaró ese continente territorio internacional "para la paz y para la ciencia".

El Buque español "Hesperides" comienza la XIV Campaña Antártica

Publicado en http://www.europapress.es/
MADRID, 30 Nov 05 (EUROPA PRESS) -
El Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) 'Hespérides', perteneciente a la Armada española, partirá el próximo viernes del muelle 'Alfonso XII' del puerto de Cartagena (Murcia) con destino a las bases españolas en la Antártida para el desarrollo de la XIV Campaña Antártica, según informó la Armada.
Un día antes de la salida del buque, el Secretario de Estado de Universidades e Investigación del Ministerio de Educación y Ciencia, Salvador Ordóñez Delgado, el almirante de Acción Marítima, Mario Rafael Sánchez-Barriga Fernández, responsables de 'Ciencias de la Tierra' y 'Cambio Global' --entidades gestoras del Programa de Biodiversidad del Plan Nacional I+D+i--, y el comandante del 'Hespérides' ofrecerán una rueda de prensa a bordo de la embarcación para explicar los detalles de la misión científica.
El 'Hespérides', al mando del capitán de Fragata José María Turnay y con 56 tripulantes y cinco técnicos a bordo, llegará el 17 de diciembre al puerto de Río de Janeiro (Brasil), donde realizará una escala técnica de tres días antes de llegar a Ushuaia (Argentina) para dar inicio el 2 de enero a la Campaña Antártica 2005-2006, tras haber embarcado al personal científico.
La Campaña Antártica finalizará en Punta Arenas (Chile) el 18 de febrero de 2006, día en el que el buque partirá hacia Las Palmas de Gran Canaria, donde su llegada está prevista para el 16 de marzo, tras una escala técnica en Mar del Plata (Argentina).
El 'Hespérides' desarrollará este año cuatro proyectos de investigación. En la Antártida realizará el proyecto ECOQUIM, dirigido por la investigadora Concepción Ávila, del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CSIC), y el proyecto BENTART, dirigido por Ana Ramos Martos, del Instituto Español de Oceanografía. Durante el tránsito de regreso desarrollará el proyecto BLOOM, bajo la responsabilidad de Javier Pérez Marrero, del Instituto Canario de Ciencias Marinas, y el proyecto CONAFRICA, dirigido por Santiago Hernández de León, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
Las investigaciones que se realizan en el buque están fundamentalmente dirigidas y financiadas por el Plan Nacional de I+D+i y la responsabilidad de la gestión científica del 'Hespérides' recae en el Ministerio de Educación y Ciencia.
La participación de la Armada en la Campaña Antártica se completa con las labores de apoyo logístico que llevará a cabo el B.I.O. 'Las Palmas' para las bases antárticas españolas 'Juan Carlos I' y 'Gabriel de Castilla', así como a la base búlgara 'San Climent Oridsky'.

miércoles, noviembre 30, 2005

Venezuela explora la Antártida

Proyecto Cumbre
Expedición de Venezuela en la Antártida: Se puede seguir lo que ocurre en la expedición visitando el sitio web del Proyecto en: http://www.proyectocumbre.com.ve
29. Nov. 2005
Viento 26 nudos. Temperatura -30
Hoy comenzamos la jornada con un viento de 24 nudos que hizo dificil levantar las carpas. El cielo se mantuvo parcialmente despejado, pero con una niebla ligera baja. Todavia podemos ver hacia el noroeste el Sentinel range, donde pareciera haber una tormenta permanentemente.
Dividimos la jornada en 4 tiempos de 2 horas cada uno e hizimos muy cortos descansos para comer y beber, pero el frio era tan intenso que preferimos continuar con muy poca comida y pobre hidratacion. Ya al final de la tarde se redujo discretamente la intensidad del viento, lo que nos permitio levantar campamento sin mayores problemas.
A pesar del viento logramos avanzar 14.1 km. Ahora nos disponemos a cenar una sopa caliente y un estofado de papas y carne.

TRACK EXPEDITION
Nuevamente caminando en blanco. 28. Nov. 2005
Despues de un largo y forzoso descanso hoy amanecio con una niebla baja que limitaba enormemente la visibilidad y el viento continuaba soplando con gran intensidad.
Decidimos levantar campamento...

Paciencia... Otro dia en la carpa. 27. Nov. 2005
Ayer durante la noche el viento y la nieve aumentaron y amanecimos hoy con vientos y nevada fuerte. La visibilidad esta en uno 5 metros.
Dias como el de ayer en el que ibamos con poca visibilidad

Caminando en la nada blanca 26. Nov. 2005
Durante la madrugada comenzo a descender el viento y nos preparamos en la manana para salir. El dia estaba bastante nublado con poca visibilidad. Recogimos el campamento con cierta dificultad ya que...

--- Se actualiza día a día, ver más en
http://www.proyectocumbre.com.ve

martes, noviembre 29, 2005

El iceberg que canta

publicado en ELMUNDO.ES
28 nov 05
(Foto: Alfred Wegener Institute)
MADRID.- El sonido es muy débil, tanto que casi pasa desapercibido para el oído humano. Pero un equipo de científicos alemanes que estudia los glaciares de la Antártida ha encontrado un iceberg sorprendente: es capaz de 'cantar' cuando está sometido a fuertes presiones.
Las ondas sonoras que emite el iceberg son de muy baja frecuencia, apenas 0,5 hertzios, lo que no es audible para el ser humano, pero sí se aprecian cuando se realizan grabaciones de las ondas sísmicas del bloque de hielo flotante. Los sonidos pueden variar, desde un zumbido similar al que emitiría un enjambre de abejas, hasta algo mucho más melódico, como el sonido de una orquesta. Sin embargo, el descubrimiento que no fue agradable para los primeros científicos que lo escucharon. "Es algo como sacado de una película del horror", aseguró Vera Schlindwein, un geofísico del Instituto Alfred Wegener para la investigación polar y marina en Alemania.
Los científicos grabaron el sonido cuando investigaban las señales sísmicas para prevenir y medir terremotos y los movimientos de las placas tectónicas en la costa de la Antártida. Según Vera Schlindwein, la señales les llevaron al iceberg Ekstroem, de 50 kilómetros de largo, 20 de ancho y 400 metros de altura que acababa de colisionar contra una península de hielo submarino. "Una vez que el iceberg se incrustó en el hielo sumbarino, el agua comenzó a circular entre las grietas y recovecos del iceberg, lo que motivó que empezara a cantar".
"El sonido tiene altos y bajos, diferentes tonos, como si fuera una nana", aseguró. "Las señales de un terremoto son distintas, comienzan con una explosión cuando la tierra se resquebraja y después disminuyen lentamente," explicó la científica. "Pero aquí la señal fue formada como un peine, con picos regulares". Esto significó que la fuente original oscilaba regularmente.
Schlindwein había visto señales casi idénticas de temblores volcánicos, pero esto no podía explicar el patrón captado porque esta fuente parecía estar en movimiento, alrededor de la Antártida.
La investigación, que ahora publica la revista Science, se realizó en julio de 2000, y los sonidos del iceberg -que se prolongaron durante 16 horas- estuvieron precedidos de dos terremotos.
El hallazgo es similar al que hace años se hizo sobre el canto de las dunas de arena, que emiten sonidos de baja frecuencia que pueden ser tan ruidosos como el vuelo bajo de un avión.

lunes, noviembre 28, 2005

Informacion del Ejército Argentino, sobre el rescate en la Antártida

Les mando este enlace donde podrán ver a los rescatistas operando dentro de la grieta sobre un "balcón" de hielo a 60 mts de profundidad y con un abismo de unos 100 mts o más hacia abajo, hacia el que arrojaban la nieve paleada en un trineo.
Oficiales y suboficiales yugando juntos, a pesar de que el cnl Figueroa (49 años) tenía una lesión muy dolorosa en su rodilla que sólo declaró al finalizar la misión rescatando el cuerpo de González.
Un abrazo, Pablo
masalladelsur@yahoo.com.ar

enlace recomendable: http://www.ejercito.mil.ar/rescate/rescate.htm
fotos
www.ejercito.mil.ar/rescate/fotos.htm

Científicos españoles comenzarán trabajos del proyecto Glackma

Publicado en Terra.com
25 nov 05
Los profesores Adolfo Eraso, de la Universidad Politécnica de Madrid, y Carmen Domínguez, de la de Salamanca, regresarán la próxima semana a la Antártida para proseguir una investigación basada en medir el calentamiento global a partir de la velocidad a la que se funden los glaciares.
El proyecto 'Glaciares, Criokarst y Medioambiente' (Glackma) se desarrolla tanto en el círculo Artico como en el Antártico y emplea los glaciares como 'sensores naturales' para calcular el aumento de la temperatura global, cada vez más acelerado en las últimas dos décadas, según explicó hoy en rueda de prensa el profesor Eraso.
Durante los próximos tres meses los científicos trabajarán en la uruguaya Base Artigas, situada en la Antártida Insular, y también en la Patagonia Chilena, con el fin de recoger los datos registrados por las estaciones de medición y comprobar su buen funcionamiento, dificultado por las duras condiciones meteorológicas.
Además, realizarán trabajos de exploración y reconocimiento con vistas a instalar una nueva estación de medida para conocer la descarga glaciar en latitudes diferentes a las que se controlan en la actualidad.
Asimismo está previsto instalar una estación en Caleta Potter (King George) que registre, además del deshielo, otros parámetros biológicos y paleo-climáticos, en coordinación con expediciones científicas coreanas y argentinas.
Esta nueva tarea se debe a que con motivo del Año Polar Internacional (2007), el proyecto español ha sido seleccionado e incluido dentro de otros dos proyectos internacionales más amplios: el CLICOPEN en la Antártida y en GLACYODIN en el Artico.
El proyecto Glackma consiste en la instalación de estaciones de medida en los glaciares de los hemisferios Norte y Sur que calibran cada hora la descarga glaciar, es decir, cómo se van derritiendo los casquetes naturales según les afectan los cambios en el clima y la atmósfera.
En los últimos tres años, primera fase de la investigación, se han instalado cuatro estaciones, de las que dos se encuentran en casquetes glaciares del Hemisferio Norte (Artico noruego e Islandia) y dos en casquetes del Sur (Antártida insular y Patagonia chilena).
Gracias a las medidas que han registrado hasta ahora se ha podido saber que la descarga glaciar aumenta de forma exponencial cada año, y que cualquier variación en la temperatura ambiente conlleva una respuesta inmediata en el deshielo de los glaciares.
También se ha averiguado que, a la misma latitud, la descarga glaciar es cuatro veces mayor en el Artico que en la Antártida, algo que se explica en que en el hemisferio Norte se concentra la mayor parte de la población terrestre, además de algunos de los países más contaminantes.
El ascenso actual del nivel del mar es un cincuenta por ciento mayor de lo que 'en el peor de los casos' se preveía hace diez años para la actualidad, según la investigación española.
En último término, se trata de tener un registro continuo de datos sobre el calentamiento global que España aportará a la comunidad científica internacional.
Para mantener en funcionamiento los puntos de medición, el proyecto sostiene convenios con instituciones de países con bases cercanas abiertas todo el año en las zonas Norte y Sur, como Uruguay, Chile, Rusia, Noruega y Alemania, porque España sólo mantiene operativas las suyas durante el verano de cada hemisferio.
Terra Actualidad - EFE

viernes, noviembre 25, 2005

Burbujas en el hielo

Burbujas de aire arrojan luz sobre efecto invernadero
publicado en http://www.mercurynews.com
LAURAN NEERGAARD - 24 nov 05
Associated Press
WASHINGTON - Hoy día hay más anhídrido carbónico en la atmósfera que en cualquier momento de los últimos 650.000 años, afirma un nuevo e importante estudio acerca del efecto que han producido los llamados "gases de invernadero" -- a los que se atribuye el recalentamiento global -- a través de los siglos.
Al analizar las minúsculas burbujas de aire preservadas durante milenios en el hielo de la Antártida, un grupo de investigadores europeos ha recalcado hasta qué punto la actividad humana ha influido en el aumento de la concentración de esos gases en la atmósfera.
Los resultados de la investigación prometen "mejorar de manera espectacular la comprensión" de los cambios climáticos, dijo el especialista Edward Brook, de la Universidad Estatal de Oregón.
El estudio, realizado por el Proyecto Europeo sobre el Hielo Profundo de la Antártida, aparece en la edición del viernes en la revista especializada Science.
Hoy día, los científicos miden directamente los niveles de anhídrido carbónico y otros gases de invernadero que se acumulan en la atmósfera debido a la ignición de combustibles y otros procesos. Esos gases ayudan a atrapar el calor del sol, tal como lo hacen los invernaderos que les dan nombre, y ello resulta en un recalentamiento gradual del planeta.
Las lecturas encontradas por los científicos en las burbujas de aire de la Antártida indican que los niveles de anhídrido carbónico aumentaron, de las 280 partes por millón que registraban hace dos siglos, a 380 partes por millón en el momento actual.
Entretanto, la temperatura promedio de la Tierra ha aumentado en aproximadamente medio grado centígrado en las décadas recientes, un incremento relativamente rápido. Muchos especialistas advierten que el aumento continuado de las temperaturas podría tener impactos graves, tales como la subida de los niveles marítimos o cambios en las pautas de las precipitaciones.
Los escépticos procuran restar importancia al aumento de los gases como parte de un ciclo que fluctúa de manera natural. Sin embargo, el nuevo estudio proporciona pruebas que refutan esa opinión.
El hielo de las profundidades de la Antártida conserva pequeñas burbujas de aire que se formaron con la caída de las nieves sucesivas durante cientos de miles de años. Al extraerse, esas burbujas permiten estudiar la composición de la atmósfera en épocas pasadas, y determinar así la fluctuación natural de tales gases.
El nivel actual de anhídrido carbónico es un 27% mayor que su máxima concentración en todas las épocas de las burbujas analizadas de la Antártida, dijo el investigador jefe, Thomas Stocker, de la Universidad de Berna en Suiza.
"Estamos más allá de la fluctuación natural" de esos gases en la atmósfera, añadió.